Mi alma sintió hambre de
tu amor,
La sed me llevo a lugares donde no he ido jamás,
Todo lo que he hecho en la vida fue lamentar,
Cubriendo mis penas ante la maldad,
Viviendo en la eterna indecisión,
Creando un mundo imaginario donde poderte encontrar,
Sintiendo al miedo como parte de mi piel,
Jamás cruce el rio de
la posibilidad,
A pesar de todo lo vivido…
Siempre mantuve en mi corazón la humildad,
He tragado mi ira ante la vanidad de los demás,
He olvidado los golpes devolviendo bondad,
Siempre mantuve en mis ojos la esperanza,
De verte un día llegar,
Cuanto más sangre dolor…
Más busque tu amor,
Camine a ciegas buscándote en la oscuridad,
Tantas noches de insomnio creyendo oír tu voz…
Tantas veces la lluvia cubrió mis lágrimas, y acallo mi voz,
Y tantas veces tome en mi puño a la tierra cargando rabia en
mi sangre,
Porque el tiempo pasaba y no te encontraba,
Todo… todo lo he dejado en ese mismo instante…
He dejado todo peso…
Para no sentirme como un preso ahogado en su oscura mente,
Todo lo vivido…
Todo lo sufrido… valió la pena porque llego el día…
Mis ojos se han
llenado de alegría,
Mi alma siente paz y ha emprendido vuelo al lugar soñado,
Tantas veces imaginado,
Por estar a tu lado… yo he creado un mundo imaginario,
Ahora se ha vuelto realidad,
Y emprendo vuelo hasta donde tu estas.
Y porque nunca me rendí…
Recibí del cielo un regalo… verte a mí llegar.
